PADRE DE PÚGIL BRITÁNICO ANTHONY YARDE FALLECE POR COVID-19
Anthony Yarde, boxeador británico, informó el domingo que su padre murió a causa del coronavirus e instó a las personas a hacer su parte para detener la propagación del virus quedándose en casa.
“Soy una persona muy privada y todavía estoy en estado de shock, pero tal vez esto pueda ayudar a las personas a quedarse en casa. Mi padre falleció ayer por este virus y estaba en forma, sin problemas de salud”, escribió en las redes sociales el domingo. “Mientras más personas salgan y se junten, más durará este aislamiento y más se extenderá. No soy médico, pero sé que si te quedas en casa es menos probable que lo atrapes o lo pases. Es en serio, no vale la pena el riesgo”.
Queensberry Promotions, del promotor Frank Warren, que representa a Yarde, emitió un comunicado que expresó sus condolencias.
“Frank Warren y todos en Queensberry Promotions quisieran expresar sus sinceras condolencias a Anthony Yarde y su familia después del fallecimiento prematuro de su padre. El coronavirus es un problema que nos afecta a todos, pero eso no hace que las bajas individuales sean menos trágicas”, decía el comunicado. “Esperamos que sus fanáticos escuchen la sincera súplica de Anthony para que la gente tome en serio los consejos del gobierno para que podamos tratar de minimizar el sufrimiento de los demás”.
El 24 de agosto, Yarde (19-1, 18 KOs) recibió una oportunidad obligatoria contra el entonces campeón mundial de peso Semipesado Sergey Kovalev. Yarde viajó a la ciudad natal de Kovalev, Chelyabinsk, Rusia, y realizó un gran esfuerzo en lo que finalmente fue una derrota por nocaut en el 11vo asalto.
Yarde regresó para un nocaut en el segundo asalto ante Diego Jair Ramírez el 8 de febrero en España y estaba programado para pelear contra su compatriota Lyndon Arthur (16-0, 12 KOs) el 11 de abril en la cartelera de la pelea por el título europeo de peso Pesado vacante entre Joe Joyce y Daniel Dubois en el O2 Arena; sin embargo, esa cartelera se pospuso debido a la pandemia de COVID-19 y se reprogramó tentativamente para el 11 de julio.